Los medios de comunicación y el suicido: Omisión o Tabú

Noticias Noticias

 

Los medios de comunicación y el suicido: Omisión o Tabú (M)

 

Muchas veces hay personas a tu alrededor que  prefieren sufrir en silencio para no preocupar a sus familiares, por miedo a decepcionarlos o por vergüenza (“la vergüenza del suicida”). Y de allí que unas tantas deciden un trágico final a sus vidas, y no por ello son malas ni cobardes, sino todo lo contrario sufren solos para ahorrarles a los demás su triste carga.

Muchas de esas personas son padres, madres, hermanos, hijos, trabajadores, vecinos, conocidos y hasta tu pareja… lo que hace  te hayas cruzado con alguna de ellas en la calle o convives a diario sin ni siquiera saberlo, son personas responsables, inteligentes, con talento, fuerza y dignidad pero que sienten que ya no pueden más con la vida y se sienten decepcionadas de sí mismas y sufren tanto que están dispuestos a dejarlo todo, hasta la vida, para acabar con su sufrimiento.

Hoy dedicamos este contenido a la responsabilidad que tenemos los medios de comunicación en el tabú del  suicidio, que no es más que el acto de quitarse deliberadamente la propia vida. El comportamiento suicida es cualquier acción que pudiera llevar a una persona a morir, como tomar una sobredosis de medicamentos o estrellar un automóvil a propósito.

Las personas que intentan suicidarse con frecuencia están tratando de alejarse de una situación de la vida que parece imposible de manejar. Muchos de los que cometen intento de suicidio están buscando alivio a: sentirse avergonzados, culpables o una carga para los demás. Sentirse como víctimas y/o sentimientos de rechazo, pérdida o soledad.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se suicidan alrededor de 800.000 personas en todo el mundo. Se trata de un dato alarmante no sólo por las consecuencias nefastas que tiene para la persona que se suicida (acaba con su vida) sino por las implicaciones que este hecho tiene entre los familiares, los amigos y el entorno del fallecido.

El suicidio puede producirse a cualquier edad: se considera raro entre los niños pero a medida que se acerca la adolescencia el riesgo se incrementa. Se considera que el suicidio es la tercera causa de muerte adolescente, mientras que la primera son los accidentes y la segunda los homicidios.

Pese a esto, las conductas suicidas son mucho más elevadas que los suicidios per se. Se calcula que por cada 20 intentos de suicidio se produce uno real, aproximadamente.

En adultos el suicidio es más habitual en personas de edad avanzada. De hecho, en España un 40% de los suicidios se producen en adultos mayores; así, según el Instituto Nacional de Estadística, el rango de edad en el que la tasa de suicidio es más elevada (independientemente del sexo) es de los 70 a los 74 años. Esta tendencia crece de manera directamente proporcional desde la adolescencia hasta la edad adulta.

En días recientes, específicamente el 10 de septiembre -día mundial para la prevención del suicidio- se analizó que los  medios pueden jugar un papel fundamental en la prevención del suicidio. Según la OMS, informar de manera responsable y adecuada es una de las medidas que pueden ayudar a prevenirlo.

En base a las directrices de este organismo internacional, SALUD MENTAL ESPAÑA elaboró una serie de propuestas o recomendaciones para los periodistas, entre las que se encuentra no descartar hablar sobre suicidio, siempre y cuando se sigan las recomendaciones de la OMS.

 

 

En la mayoría de los casos, el suicidio se pueden prevenir, aunque no es fácil valorar la posibilidad de que una persona se suicide dada la propia naturaleza del ser humano, en la que cada persona es única y tiene su particular manera de vivenciar las situaciones y de interpretar la realidad, convirtiéndola de manera subjetiva en su realidad.

La mayor parte de las personas con ideación suicida da avisos evidentes de sus intenciones. Solo un escaso número de suicidios se produce sin previo aviso, por eso es importante prestar atención y tomar en serio todas las amenazas que se refieren a la autolesión, especialmente cuando son persistentes.

Lo que debes saber para prevenirlo

 

SALUD MENTAL ESPAÑA aconseja no describir explícitamente el método empleado por la persona y evitar los detalles o publicar fotografías o notas suicidas.

Otro aspecto muy relevante es mencionar siempre los recursos de ayuda disponibles, como líneas telefónicas o servicios de salud mental, al igual que ya se hace en las informaciones sobre violencia de género con  atención a estas víctimas.

Otra recomendación es cambiar el enfoque: no limitarse a hablar únicamente sobre los efectos nocivos del suicidio, sino dar cobertura también a las historias de superación y al afrontamiento positivo en circunstancias adversas.

Con información de Efe Salud y Carlos Damian Cappa.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmailby feather

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

47 − = 44